Hace tres días ví a mi hijo ahogado en la piscina (se ha salvado).La ayuda tardó mucho en llegar, los mensajes de los médicos al principio fueron muy duros... sentía que lo perdía. Todo ha sido muy traumático y aunque sé que es muy pronto para estar mucho mejor, no puedo dejar de repetir mentalmente la situación. No puedo dormir. Tengo miedo a las posibles secuelas no diagnosticadas. No puedo hacer nada en casa. Todos me dicen que tengo que pensar que fue un milagro, lo positivo, que está conmigo, que hemos tenido suerte.. Pero no logro controlarlo. Estoy muy desencajada, muy asustada y sin ganas de nada.