No darle importancia
El mejor remedio es no darle importancia, aunque te cueste. Cuando lo veas, ignóralo, mira a otro sitio, si nota que tienes ansiedad y angustia por morderse las uñas, lo hará más. Inténtalo y verás como poco a poco se le irá yendo la mania. A mí me pasó con el mio, y a la misma edad. Fuí a hablar con la psicopedagoga de la guarderia (puedes hacerlo tú también) y nos dijo que no le diéramos importancia, que lo intentásemos, que el niño era muy nervioso y era para él cómo una forma de descarga, asique nada de reñirle ni de nada, sólo ignorarlo en esos momentos, y la verdad ha dado resultado. A penas se las muerde ya, y aunque se toca los deditos unos con otros, ya no se los lleva a la boca.
Un beso