Mi beba nace el 12 de julio del 2007 por cesárea ya que estaba en posición podálica y gracias que fue así porque luego me descubrieron que mi útero estaba muy débil por todas las perdidas anteriores y no hubiera resistido un parto natural.
Veo su carita tan tierna me enamoro rápidamente de ella, me la traen a la habitación a las dos horas de haber nacido la pongo a la teta sin que nadie viniera a supervisar la posición ni nada lo hago de puro instinto con todo mi amor. Al segundo día vinieron a supervisarme y yo tenía los pezones destruidos, sin embargo seguí adelante pero me decían que limitara el tiempo porque me iba a lastimar mas y yo la ponía igual cada vez que ella lo demandaba.
Me voy a mi casa al cuarto día y sigo amamantando y la nena lloraba día y noche y me pedía cada media hora. Decido al octavo día de nacida llevarla al hospital donde había nacido a consultar con las puericultoras o matronas como le dicen ustedes para que me ayuden y lo que me dice es luego de sacarme leche con un extractor que mi leche no alcanzaba y que seguro tenia hambre y ahí nomás sacaron un bibe y le dieron formula, yo con mi poca información ( debido a que mi atención se fijo en conservar mi embarazo) y lo que había leído y sabia le digo pero se va a acostumbrar y me va a dejar la teta a lo que me responde no, no se acostumbran. A esto se sumo que la nena había bajado de peso y no aumentaba y el pediatra que le consultamos me indica la fórmula igual que la matrona. Te imaginas que con toda lo que había pasado me asustaron y me hicieron perder la confianza en mi y mi leche y además me dijeron que solo le diera 5 minutos porque si no se iba a cansar mucho y no iba a comer y necesitaba engordar. Vuelvo a mi casa llorando y me limite a hacer lo que me dijeron. A la semana sin darme por vencida decido agarrar la nena y me la llevo a Fundalam ( fundación para la lactancia) a pedir ayuda, me enseñan el método del relactador con la sondita y me dicen que no le de mas biberón que esa era la única forma de relactar, vuelvo a mí casa y por dos semanas lo intento pero era francamente extenuante ya que la nena cada vez que le ponía la sonda o me la pegaba al pezón soltaba el pezón y se quedaba chupando de la sondita, las tomas era agotadoras, decido seguir con el biberón y aumentar el tiempo en la teta, pero la nena cada día rechazaba mas y mas el pecho yo seguía insistiendo. De mas esta decir que mis lagrimas derramadas eran inimaginables, noche y día me preguntaba porque me habia pasado esto. No contenta y conforme llamo a la liga de la leche cuando la nena cumplo dos meses y prácticamente no agarraba o lo agarraba poco el pecho, allí me apoyan y me dice que la ponga al pecho a la nena durante todo el día, que le quite el chupete y la ponga a chupar ( ah me olvide que en el hospital donde nació le inculcaron el chupete desde el primer día ) así lo hice me pase dos semanas en cueros ( en tetas) poniéndola cuerpo con cuerpo para que me oliera y se empezara a acostumbrar y piel con piel y la hacia chupar todo lo que podía, intente sacarle el chupete pero realmente esas dos semanas fueron agotadoras la nena lloraba, se arqueaba para atrás, escupía, y yo intentaba cada media hora otra vez distintas posiciones, besándola que me oliera y nada, no logre que se cogiera al pecho.
Ya hace dos semanas que baje los brazos y solo le doy biberón, Pero mis lagrimas no cesan y solo deseo volver el tiempo atrás y haber tenido la oportunidad de estar informada y apuntalada. Lo único que deseo es que si hay algo por hacer me lo puedan aconsejar porque nunca me doy por vencida, soy una madre dedicada con amor 100% a mi beba y deseo con todo el alma y el corazón darle el alimento de mis pechos. No pasa un solo día que llore y que me pregunte que hice mal y porque fracase.
Agradezco y espero puedan darme unas palabras de aliento.
Mariana
