Hola, hoy siento la necesidad de escribir sobre mis hijos, no para preguntar nada ni pedir consejo, sino para decir lo afortunada que me siento, tanto que siempre me pregunto que cosa tan buena habré hecho yo en esta vida o en otra para merecer los hijos que tengo.
Mis hijos tienen 3 años el mayor y 10 meses el pequeño. El mayor (Carlos) es un pedazo de pan, siempre me dice lo mucho que me quiere y me da mil besos, cuando vamos por la calle lo llevo de la mano y él me va besando la mano. Es un sol y muy obediente, es tímido y muy vergonzoso, muy observador, siempre se da cuenta si me he puesto pendientes o llevo ropa nueva y me dice lo guapa que estoy El pequeñín es otro solete (Marcos) cuando estaba embarazada todo el mundo me decía que no salían dos iguales y que como el mayor es tan bueno esté sería un terremoto, pues el pobre es más bueno que el pan, duerme, come, se conforma con todo, lo puedo dejar en el parquecito o en la trona para ponerme a limpiar y no dice ni mu, tanto es que ayer mi suegra que se quedó un ratito con él me dijo que lo tuvo que sacar del parquecito porque le daba pena que estaba ahí sin quejarse ni nada jeje. Eso sí, este parece que tendrá más genio y también me las voy a ver negras para darle de comer sólido que no quiere saber nada.
Bueno chicas todas tenemos nuestros amores unos más moviditos que otros, pero todos para comérselos