Claro que alguna vez
me han decepcionado, y seguro que yo a ellos. Pero aunque no somos una familia ideal ni unidísima, si que tenemos una cosa clara y es, que ya tendría que ser una cosa gordísima, para dejar de hablarnos. Yo pienso que casi todo se puede solucinar, y estar a mal con la familia, amigos, compañeros,..., es muy doloroso, y además siempre repercute en otras personas, y eso no es justo
Besos