Me gustaría compartir experiencias sobre los abusos e irregularidades que hayan podido sufrir en ciertas clínicas de fertilidad. La experiencia suele ser tan devastadora que terminamos sin fuerzas para quejarnos, pero considero que es nuestra responsabilidad avisar a las mujeres de la manipulación que existe por parte de este sistema. Sólo ellos tienen voz, porque ellos tienen los medios. Hablemos también nosotras. Un abra
zo a todas.