Sólo quiero contaros mi experiencia por si a alguien le sirve de algo.
Mi niño nació por cesárea con 4,020kg. Lo puse al pecho en cuanto me recuperé de la anestesia. Los dos primeros días lo tuve enganchado casi sin parar. Tenía los pezones destrozados pero yo insistía. Al tercer día en el hospital me empezaron a traer biberones de refuerzo porque mi hijo estaba perdiendo demasiado peso. Le di algunos porque era novata y estaba asustada y, como había sido cesárea tardó cinco días en subir la leche, pero mi cuñada que es pro-lantancia total me animó a no darle los biberones y a insistir con la teta. Empezamos a tirarlos al váter. Mi niño había perdido cuatrocientos gramos al salir del hospital y aunque yo seguía asustada confié en mi cuñada y en lo que había leído sobre las excelencias de la leche materna y seguí sólo con teta. Eso sí, todo el santo día con el pecho fuera. Cuando el niño tenía diez días me puse a cuarenta de fiebre y era por una mastitis. Los de urgencias me dijeron que debía suspender la lactancia porque tenía que tomar antibiótico, pero una vez ingresada en planta me dijeron que sí podía seguir con la teta. Se contradecían en el mismo hospital. Decidí seguir con el pecho y entonces ingresaron a mi niño también para que estuviera conmigo y poder darle a demanda. Era un dolor horrible pero valió la pena sufrirlo. En cinco días salimos del hospital y hasta el mes y medio ganó poquísimo peso el pobre. Pero yo insistía y no escuchaba los reproches de mi madre,ni de mi suegra ni de nadie. Mi marido me apoyaba. A los dos meses ya estaba gordote, gordote, más que los cuatro o cinco niños de biberón de su misma edad qeu conocíamos. Y así siguió creciendo bien hermoso alimentándose sólo de teta a demanda hasta los seis meses. A partir de ahí empezamos con otros alimentos también . Volví al trabajo cuando tenía siete meses y medio y seguimos con la teta a demanda por las tardes y noches. POr las mañananas comía cereales con leche en polvo (intenté sacarme leche para papillas pero fui incapaz), fruta, yogur, verduras... todo a su tiempo. Nunca se ha bebido un biberón. Mi hijo tiene ahora VEINTICINCO meses, está delgadito porque no para de moverse pero es muy alto (percentil 50 de peso y 90 de estatura). Come más o menos de todo y sigue con su tetita para dormir,cada vez qeu se despierta por la noche (dormimos juntos los tres), para consolarse tras un golpe, o porque le apetece tener ese contacto tan maravilloso conmigo. NO sé hasta cuándo será. Me alegro de no haber tirado la toalla al principio, ni por las heridas de los pezones, ni con lo que tardó la leche en subir, ni con el dolor de la dichosa mastitis. La lactancia es una experiencia preciosa. Luchad por ella.
