Miedos y dudas
Hola a todas.
Estoy hecha un lío con la idea de buscar o no buscar un tercer hijo. Tengo dos hijas ya, y llevábamos desde octubre buscando el tercero. Pero de repente me han entrado miedos, dudas, agobio... no sé si esto es lo que quiero hacer. De pronto me he agobiado.
Por un lado, me gustan mucho las familias numerosas. Creo que para los niños es mejor tener hermanos, que tienen que aprender a compartir y a convivir, y que para ellos, para su desarrollo y educación, es lo mejor. Para mí siempre ha estado la familia (los niños, el tener hermanos) por encima de tener muchos juguetes o cosas materiales, y siempre he pensado que el mejor regalo para un niño es un hermanito.
Por otro lado, creo que tener dos hijos es más cómodo, más práctico, más manejable. Me da miedo estresarme en exceso, o agobiarme en exceso. Me da miedo volverme irritable y gritona. Me temo que no siempre tengo toda la paciencia que debería tener. 
Ahora mis hijas ya son más mayorcitas, tienen 6 y 3 años, y ya empezamos a respirar. No sé si es buena idea meterme en otro "fregao".
También es que ahora estoy en un buen momento profesional, acabo de promocionar, y estoy muy a gusto en mi trabajo, con mis compañeros y con mi jefa. ¿Irme ahora de baja maternal varios meses? Se me hace un poco cuesta arriba.
También me preocupa que se repita la depresión postparto que tuve con mi segunda hija (tuve un parto difícil y un postparto con complicaciones, y me dio depresión postparto, que con la primera de mis hijas no la tuve). Es muy duro. Y si a eso le sumamos que yo ahora mismo estoy muy volcada en el tema profesional, me da cosilla que se me sume el dejar de trabajar esos meses, tenerme que encerrar a cuidar del bebé, que eso me agobie y me empiece a sentir atrapada.
Para colmo mi marido está superilusionado con la idea de tener un tercer bebé. Hace dos días tuve que hablar con él y decirle que tengo muchas dudas, y que en estas condiciones no creo que sea lo mejor tener un hijo. Y el hombre está disgustado, me pone cara de pena. Y me da realmente mucha pena, porque sé que él lo desea mucho, pero es que... es que no me puedo meter en esto sin estar segura. ¿Me entendéis?
Por otro lado... y ya sé que soy contradictoria... cuando pienso en volveme a poner el anillo vaginal y dejar de buscar, me da pena. De hecho, hace mes y medio (noviembre) tuve un retraso y creí que estaba embarazada, y hasta me hizo ilusión.
Qué dilema, y qué comedura de tarro. Sé que en estas circunstancias realmente nadie me puede decir nada, porque es un tema muy personal, pero... quizá debería esperarme unos mesecillos a tener las cosas más claras, ¿no?
Perdón por el rollo, y gracias a las que hayáis conseguido leer hasta aquí, tiene mérito 
Saludos
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Gracias
Muchas gracias por contestarme chicas. Llum, me pasa lo mismo que a ti, lo de jugar con fuego. Me he sentido identificada. De hecho ni siquiera sé si este mes me habré quedado embarazada (no lo sabré hasta dentro de unos días). No me gusta estar así, porque creo que lo suyo es que tome una decisión en firme (buscar o no buscar) y ser coherente con lo decidido. Es la única manera de que el bebé venga cuando tiene que venir, cuando los padres tienen las ideas claras y actúan en consecuencia.
Por un lado no lo quiero dejar mucho tiempo, para que no se quede demasiado descolgado de mis hijas. Pero por otro lado, no creo que se deba "forzar" la cosa, si yo ahora tengo dudas, pues a lo mejor sencillamente no debería quedarme embarazada.
Desde ayer estoy pensando directamente en volver a ponerme el anillo vaginal, y esperar unos meses a estar preparada. Pero me da pena en parte... tengo toda la preconcepción hecha, la revisión ginecológica pasada con luz verde, el cuerpo a rebosar de ácido fólico 
Las reglas ya están reguladas después de haber dejado el anillo vaginal (los primeros ciclos fueron un poco rarillos pero ahora ya estoy bien). El cuerpo parece estar preparado. Me da un poco de pena parar un tren que ya estaba en marcha y a punto. Pero si en mi interior hay dudas, quizá no sea el momento. Quizá deba esperar un añito más, o unos meses. No lo sé.
Me da mucha penita por mi marido. El pobre tiene muchas ganas.
Qué difícil es esto, chicas. Locatiss tiene razón, el tercer hijo es difícil de decidir. De hecho yo con la primera y la segunda no tuve dudas, sabía que quería tener a la primera (de hecho fue muy muy deseada, tuve un aborto previamente y lo pasé fatal), y la segunda también la tenía clarísima porque no quería tener una hija única. Las dos vinieron sin dudas. Por eso esta vez me siento tan perdida. Tener un hijo con dudas no sé si está bien.
