Pues eso, ayer comí una chispa, un bocado a un canapé que parecía otra cosa. Pregunté y efectivamente era picadillo de boquerones en vinagre con mahonesa. No estaban previamente congelados, también lo pregunté en el bar, y eran caseros, los compraron en la pescadería y los arreglaron allí. A la hora escasa llegué a casa y me obligué a vomitarlos, pero claro no sé si lo eché todo o si la bactería, en el caso de tenerla, ya campaba a sus anchas, bueno... que tengo un disgusto.
En la hoja que me dieron en monteprincipe no venía que no se pudiera comer pescado crudo, yo lo sé por el foro, así que le doy vueltas y pienso que no será tan importante, y que además por un bocadito de nada no me tengo que preocupar, pero.... estoy sin vivir.
Vosotras que creéis, ¿os preocuparíais? la verdad, eh, no vale decirme que no para que me tranquilice yo.
Besos y gracias