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Infusiones durante el embarazo
Posted by Beatriz March 3, 2008
La ingesta de agua tanto en el embarazo como en la lactancia es muy importante. Un correcto aporte de este líquido asegura que tanto la madre como el feto estén perfectamente hidratados y puedan desarrollar sus funciones vitales de manera adecuada. Pero para muchas mujeres beber agua es una tarea pesada, por no hablar de las molestias que aparecen cuando el aumento de volumen placentario presiona la vejiga.
Por eso una buena manera para tomar agua sin tener sed es beber infusiones, pero ¿cuáles son adecuadas y cuáles perjudican al bebé? En primer lugar debemos hacer hincapié en que los preparados para infusión se compren siempre en centros autorizados y regentados por profesionales: herbolarios, farmacias o parafarmacias. La venta ambulante de plantas medicinales no ofrece garantías ni sanitarias ni higiénicas. Una vez dicho esto, vamos a repasar los tipos de infusiones que sí y que no podemos tomar.
El jengibre, el escaramujo, la flor de azahar, o el tomillo, por ejemplo, son seguras en infusión y no plantean problemas. Aún así, os recomiendo no tomar cantidades excesivas. También el café, a pesar de estar en entredicho, suele ser inofensivo (una taza al día), igual ocurre con el té verde o negro y con la hierba mate, una infusión al día no perjudica a la madre ni al feto, pero es mejor tomar estas infusiones descafeinadas, así la seguridad aumenta.
Las plantas que no son seguras en infusión, tintura, cápsulas, polvo, etc., son las siguientes: ruibarbo (NUNCA lo tomes en el embarazo, provoca contracciones uterinas que pueden hacerte abortar), té de hojas de frambueso, poleo menta, manzanilla, hierba luisa, ortiga, romero, salvia (éstas dos últimas sí se pueden espolvorear en las ensaladas, por ejemplo, pero no tomarlas en infusión), raíz de regaliz (puede subir la tensión arterial), hoja de coca (por su contenido en cocaína), vetiver, consuelda, valeriana e hinojo.
