Mi experiencia con aborto quirúrgico
Muy buenas a todas!! Acabo de crearme la cuenta en Enfemenino.com y este será mi primer mensaje. Hace unos meses decidí realizarme una Interrupción Voluntaria del Embarazo, que me creó muchas comeduras de cabeza, horas y horas pensando, sin dormir... por eso, cuando me la realizaron y todo terminó, me prometí a mí misma que escribiría toda mi experiencia en alguna parte para poder ayudar a otras mujeres que, como yo, estarán ahora o en un futuro llenas de dudas. Así que allá va.
En mi caso, tenía 18 años y muy claro que quería interrumpir mi embarazo. Me enteré a las 3-4 semanas, según los dos test de embarazo que utilicé. Una vez segura de que estaba embarazada, mi novio y yo empezamos a informarnos sobre clínicas de embarazo en nuestra ciudad, Valencia (España). Creo recordar que solamente hay 6 CLÍNICAS HABILITADAS PARA INTERRUPCIÓN VOLUNTARIA DE EMBARAZO EN VALENCIA, el resto NO SON LEGALES. Esto es extremadamente importante, de modo que, por favor, tened mucho cuidado con las clínicas. Llamamos a las 6 clínicas privadas y preguntamos en todas lo mismo: precio, eficacia, en cuánto tiempo tendría mi primera cita, métodos, etc.
He de decir que, si te enteras de que estás embarazada al poco tiempo, tienes la opción de tramitar el aborto por la seguridad social. En mi caso, como ya estaba de varias semanas no quise esperar, pues he oído que son unos trámites algo largos y además al ser de otra Comunidad Autónoma me sería todavía más complicado.
Así pues, como impaciente que soy, elegí la clínica que más pronto de concedió la cita. Se trata de la Clínica Acuario. He de decir que no era la que más me convencía, así que si sois de Valencia os recomiendo que miréis bien las páginas webs de cada clínica, comprobéis que efectivamente los médicos están especializados en ginecología, llaméis e incluso si es posible visitéis antes las instalaciones.
Me dieron cita para el día siguiente al que llamé. Estaba muy nerviosa, pensaba que me iban a juzgar por ser tan joven, pero tenía las cosas muy claras y sabía que era lo que tenía que hacer.
Llegó el día. Me dirigí a la clínica con una íntima amiga. Creo que es importante ir acompañada por una persona de tu más profunda confianza, y pedirla que te apoye durante todo el proceso. En mi caso no se podrían haber portado mejor conmigo, y estaré eternamente agradecida.
Llegué a la clínica, y en la recepción me dieron los famosos papeles que te dan para que te leas y reflexiones si estás segura de abortar. En ellos básicamente vienen: los diferentes centros en tu país donde se puede realizar el aborto, los precios, las ayudas que hay para madres en diferentes circunstancias... lo leí por encima y se lo entregué a las recepcionistas.
También te entregan otro papel que rellenarás con todos tus datos: edad, pareja, última menstruación, síntomas del embarazo, estudios, trabajo... También lo rellené y se lo entregué.
Esperé bastante tiempo y finalmente la doctora me llamó para pasar.
Comenzó a leer el papel que le había entregado, me preguntó las típicas preguntas de si mis padres estaban de acuerdo, qué anticonceptivo utilizaba, etc. Es cierto que en algún caso me sentí un poco atacada o juzgada, lo cual me extrañó bastante, al tratarse supuestamente de una doctora que realiza a diario este tipo de intervenciones en todo tipo de mujeres.
Después me hizo la ecografía. Imprimió las imágenes y me dijo que estaba de unas 4 semanas.
Antes de nada, quiero decir que yo tenía clarísimo que no quería entrar a un quirófano, es decir, que quería llevar a cabo el ABORTO FARMACOLÓGICO. Por tanto, ya había buscado por mi cuenta todo tipo de experiencias, el contenido de las famosas pastillas con las que consigues abortar...
Mi sorpresa fue cuando la doctora me dijo que a esas alturas del embarazo no era nada recomendable el aborto farmacológico, pues as medida que avanzan las semanas se va haciendo menos efectivo y más doloroso. Yo no daba crédito, ya había asimilado el tipo de interrupción al que me iba a someter y me agobié muchísimo. Me explicó más detalladamente el aborto quirúrgico por succión al que me debería someter, que más adelante explicaré. Al verme agobiada, me dijo que saliera a que me diese el aire y cuando me lo pensase bien volviese. Eso hice, y me pareció de muy mal gusto lo que me dijo una de las recepcionistas al verme salir: ¿nos dejas ya el dinero pagado? ¿piensas volver, no? A lo que yo respondí: no, mejor lo pago luego. Y, sí, voy a volver.
Salí a la calle y lo comenté con mi amiga y con mi novio. No me quedaba otra, serían solo 10 minutos y todo habría terminado. Así que me llené de fuerzas y volví a entrar.
Me metieron en una sala con dos camas, que ya había visto por fotos y que todas las clínicas tienen para que, tras el aborto, las mujeres puedan descansar unos minutos, y me pidieron que esperase. Allí había una mujer descansando de su interrupción. Le pregunté qué tal había sido. Me respondió que era como un dolor muy fuerte de regla, que dolía bastante pero se pasaba rápido.
La enfermera entró en la habitación y me dio una bata y unas zapatillas de quirófano. Me dijo que me desnudase y entrase solo con eso. Así hice, me desnudé, me puse aquello, entré al baño a orinar y me miré al espejo: estaba blanca y temblando. Pensé en mi amiga y mi novio, únicas personas que sabían y saben esto, y saqué fuerzas de donde pude.
La doctora vino a buscarme y me llevó a la sala de intervención. Era una sala pequeña, con la camilla donde me senté y poco más. La doctora y la enfermera intentaban tranquilizarme, pero yo notaba que era de forma muy forzada, tipo: ¿qué estudias?, ¿te gusta esta canción?
Me hicieron prueba del RH ya que con los nervios no me acordaba de cuál era, así que intentad apuntaros vuestro grupo sanguíneo también.
Así, te colocan un instrumento de metal que te abre la vagina y es un poco molesto. No lo vi porque no quería ver nada, pero en mi cabeza me lo imaginaba como una especie de pinza. Me debieron poner la anestesia local pero yo no me enteré de lo nerviosa que estaba, por eso no sé si sería mediante una pomada, jeringuilla o cómo. Entonces te introducen una especie de tubo en la vagina conectado a una máquina succionadora. Por otra parte, te ponen el gel en la barriga para ir haciendo ecografías y comprobar que el útero se va quedando vacío.
La máquina comenzó a succionar el contenido de mi útero y sentí bastante dolor. Es cierto que es parecido a una regla muy dolorosa. El caso es que puedes decidir que te suministren anestesia general, pero yo, por ser más barato y decidirlo con prisas, me decanté por la local.
De vez en cuando, la doctora paraba de succionar y cambiaba el tubo por uno más pequeño y así sucesivamente, pues el contenido de mi útero era cada vez menor. En esos momentos yo me tranquilizaba y cogía fuerzas para la siguiente succión, que me volvería a doler bastante.
Yo cerraba los ojos, pero la enfermera me decía que los mantuviese abiertos, y que respirase de forma pausada y cogiendo mucho aire. Me dio la mano y eso me tranquilizaba. Llegó el final. Pusieron la ecografía y mi útero estaba vacío. Me pusieron varios algodones en la vagina, que fueron cambiando hasta que prácticamente dejé de manchar. Me retiraron el aparato, me ayudaron a bajar, me colocaron una compresa y me llevaron de vuelta a la habitación de antes.
Me dijeron que reposase y me dieron un zumo por si me bajaba el azúcar. Me senté tan solo unos minutos y me empecé a vestir, quería salir de allí y reunirme con mi amiga. Salí, pagué los 380 y me dieron cita en 15 días para hacerme una última ecografía y comprobar que todo estaba en orden.
Al día siguiente tuve bastantes dolores aunque no tomé nada para aliviarlos. Solo recuerdo que compré muuuuucho chocolate y estuve tirada en el sofá. Sin embargo, para despejarme y no deprimirme, decidí ir a clase, comprar, etc... hacer vida normal. Algunos días sangraba, otros no... en general poquito. Y a parte de ese día no me volvió a doler más. (He de decir que soy una mujer a la que prácticamente ninguna menstruación le duele, no sé si en parte tendrá que ver)
A los 15 días volví a la clínica, me hicieron la eco y comprobaron que todo estaba correcto. Me aconsejaron el preservativo como anticonceptivo y quedaron a mi disposición.
Y eso fur todo....a veces lo pienso y no me lo creo. Hay días que me siento culpable y pido perdón por la vida que no he dejado crecer... pero en el fondo sé que es lo que tenía que hacer.
En resumen, si estás de varias semanas te recomiendo el aborto quirúrgico. Yo, la más miedica del mundo, te puedo asegurar que no es para tanto y que probablemente los dolores que te provoque el farmacológico sean mayores. Sé que es difícil entrar a un quirófano (Yo nunca había entrado a uno) pero de verdad, son solo 10 minutos, se acabará antes de lo que piensas. Siempre ve acompañado por una persona de tu confianza, te dará el apoyo suficiente para que lo hagas. A día de hoy puedo decir que no me arrepiento en absoluto de haber cambiado de tipo de interrupción en el último momento.En cuanto a los precios, en la clínica Acuario a la que fui y en alguna más era 380, creo que lo más barato que encontré. En el resto es cuestión de que preguntéis... algunas 400, otras 600... dependiendo de si eliges anestesia local/general, del tipo de intervención, etc.
A mí podría decir que me trataron de forma adecuada con algunas excepciones como las que he comentado, y sí repetiría en esa clínica, aunque creo que las hay mucho mejores.
Espero que os haya servido de ayuda... era una espinita que tenía clavada, pues cuando a mí me ocurrió se me vino el mundo encima y me hubiera gustado que alguien me contara su experiencia para poder decidirme.
Muchos besos, suerte y ánimo para todas!!!!!!
Ver también
Y los tres días de reflexión por ley desde que te entregan los papeles informativos?.
Que no, que no.
De mentiras, nada.
Simplemente esa ha sido mi experiencia y la he querido contar por si a alguien le es útil.
Sé y he dicho en la publicación que la interrupción puedes realizarla de manera gratuita si así quieres, pero no fue mi caso.
Creo que éste testimonio se ha quedado un poco obsoleto, pero dado que sigue apareciendo en los resultados de búsqueda de Google, me gustaría aportar una experiencia más actualizada.
Más abajo pongo un enlace con los pasos a seguir según tu comunidad autónoma, pero por ejemplo en la Comunidad Valenciana se acude a los centros de salud, al área de MEDICINA SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA y desde allí te explican todo el trámite y te dan un sobre con toda la información de ayudas a la maternidad, etc dándote los 3 días de reflexión para confirmar la interrupción del embarazo.
Mi experiencia me dice que cuando se acude a solicitar una IVE hay que ir muy segura y preparada psicológicamente. En mi caso (y no me podía creer que esto pasara en España) intentaron convencerme de mil formas para que siguiera con el embarazo, incluso recurriendo al chantaje emocional. Y tras irme un par de veces confundida a casa y casi convencida, decidí no hacer caso de opiniones externas, ni del personal de allí. Estudié bien mi situación, cómo me sentía y puse los pies en la tierra. Así, sin presión, liberándome de miedos y habladurías, y sin más opinión que MI REALIDAD, decidí interrumpir el embarazo. Creo que ha sido la decisión más responsable y madura de mi vida. (Por supuesto, el comportamiento del personal de este área, no fue el normal y no te tiene por qué pasar lo mismo que a mí. Ellos deben de ser neutros, entregarte la información, darte los 3 días de reflexión y ahí termina su trabajo)
Una vez en la clínica IVE me trataron muy bien, yo iba con miedo a que me siguieran juzgando e intentando convencer, pero fueron muy respetuosos y cariñosos en todo momento. Estaba de 9 semanas y me dieron las dos opciones, con el método de pastillas corría el riesgo de que no funcionara del todo bien, quedaran restos y tuviera que pasar igualmente por la intervención quirúrgica, me dijo que si estuviera de menos semanas no habría problema, así que opté por la segunda. Fue muy rápido, apenas 15 minutos, de los que realmente el proceso son sólo unos minutos. El dolor de los pinchacitos de la anestesia local es muy leve, como la anestesia del dentista, un leve pinchacito y luego sólo notas como dolor de regla, no notas succión ni nada de dolores fuertes. es todo muy rápido y soportable. Por la tarde sí que sangré bastante y tuve algún mareo, por lo que es conveniente estar acompañada y reposar. Me dieron unas medidas a seguir y un teléfono por si tenía alguna emergencia, pero todo fue bien. Psicológicamente también hay que estar preparada, saber que has tomado la decisión más acertada y darse un tiempo para reponerse, pero afrontando con fuerza y ánimo la situación.
Cuando sales de la clínica es un sentimiento de alivio y tristeza a partes iguales que hay que saber manejar para quedarse con lo bueno y recuperarse.
En éste enlace están los procesos a seguir según cada comunidad.