Mi traumática experiencia de parto en Hospital La Vega de Murcia
Hola buenos días, me gustaría contaros mi experiencia de parto en el hospital La Vega de Murcia. Este hospital que promociona su unidad de partos con el eslogan de “el parto que siempre soñaste!” es cualquier cosa menos un hospital respetuoso con las madres y mucho menos con los bebes. Os cuento:
Mi experiencia de parto en el hospital la Vega de Murcia fue sencillamente PÉSIMA. Sí, es cierto que habrá quien piense que ya me puedo dar con un canto en los dientes, de que tanto mi bebé como yo salimos vivos, pero no, no me vale, porque ni él ni yo salimos ilesos, en absoluto.
Vaya por adelantado que fue un embarazo complicadito, porque excepto diabetes gestacional, tuve tooooooooodas las molestias habidas y por haber , y también tuve contracciones desde casi el 5º mes. En especial fue muy molesto y doloroso la diástasis de la sínfisis púbica (separación anormal y excesiva del ligamento que une los dos grandes huesos de la pelvis), que creo que fue lo que causó que las contracciones fueran especialmente dolorosas. En fin.
A las 36 semanas, empecé a tener contracciones fuertes e incluso me dijeron en urgencias que el proceso ya se había iniciado, pero que aun podía tardar bastante. Sin embargo yo me notaba muy pero que muy rara un par de días antes de ponerme de parto y se lo dije a la ginecóloga, que yo creía que estaba a puntito. Ella me contestó con bastante desprecio que eso se lo llevaba diciendo desde el principio y que era una exagerada. Intentó reconocerme pero (no sé por qué ni siquiera pudo terminar porque me dolía una barbaridad!!. Estaba de 37 semanas.
Me mandó al hospital para que me provocaran el parto, pero no dio tiempo porque a los 10 minutos de entrar me empezaron las contracciones de parto. 20 minutos después las contracciones eran tan salvajes que había dilatado 7 cm y tenía contracciones prácticamente seguidas y muy, muy largas. Hasta ahí, quitando que nuevamente la epidural no me hacía efecto, y me quería morir con cada contracción, todo iba más o menos bien, pero entonces en el monitor vieron que el peque no estaba bien, que había sufrimiento fetal y había que hacer una cesárea de urgencia.
Me pasaron a quirógrafo y en cuanto el anestesista dio el ok, empezaron. No me dolía, claro, pero me notaba TODO, y tenía movilidad, de hecho el anestesista me preguntó si podía mover las piernas, yo probé y le dije que sí, entonces la ginecóloga empezó a gritar ¡¡ estate quieta!!! (solo había movido un poco una pierna) y el anestesista se disculpó y le dio a chorro a la anestesia, con lo que me puse a vomitar por efecto de tanta anestesia. Y ahí estaba yo, vomitando, intentando moverme lo menos posible porque la “ginecóloca” no dejaba de gritar que me estuviera quieta y que "no se lo estaba poniendo nada fácil!!", mientras, notaba como pegaban tirones y me movían por dentro para sacar a mi hijo. Cuando terminaron de "trajinar" conmigo, y de pesar y limpiar a mi bebé, en lugar de ponérmelo piel con piel o algo parecido, me lo enseñaron desde lejos y se lo llevaron (yo suponía que se lo llevarían a mi marido). Cuando terminaron de cerrarme y demás me explicaron que había sido una cesárea muy difícil, que me habían tenido q abrir más de lo normal, porque no podían sacar al bebé y que además me había desgarrado el útero por dos partes, con lo que me lo habían tenido que parchear con una red. Vamos, una epopeya!!
Me llevaron a observación para recuperarme y yo pensaba que cuando me recuperara un poco de la anestesia, me subirían con mi bebé. Pues no. Estuve hasta las 2 de la mañana allí (nació a las 8 de la tarde) y cuando me subieron a la habitación me dijo mi marido que sí, que lo había visto y le habían dejado DARLE UN BIBERÓN!! pero que se quedaba allí en el nido. Pregunté a las enfermeras si había algún problema y me dijeron que no, que estaba perfectamente, pero que el pediatra había dicho que se quedara allí, y allí se quedaba hasta que volviera a pasar el pediatra al día siguiente ¡¡!! Y allí me quedé yo llorando de dolor y de preocupación por mi bebé.
A mediodía del día siguiente pasó el pediatra (después de mucho insistir y mucho preguntar por él) y me dijo que lo había dejado en observación para que yo pudiera descansar, y porque al nacer tuvo un poco de problemas de respiración, porque el parto había sido muy duro también para él, pero que estaba perfectamente. Le dije que por favor me dijera si de verdad estaba bien porque no podía estar conmigo, y que además quería darle el pecho. Él contestó, que no fuera tonta, que así descansaba y que además ni siquiera tenía leche todavía, pero que si insistía.... !¡¡ me lo traía.
Pasaron casi 24 horas desde que nació hasta que pude tocarlo y abrazarlo, y por lo que me dijeron después, se pasó casi las 24 horas llorando encendido a todo llorar (según me dijeron porque tenía mucho carácter) y para cuando me lo trajeron ya le habían dado un montón de biberones y cuando lo ponía al pecho, lógicamente lloraba desconsolado porque no sacaba. Además tardé bastante más en tener la subida de la leche, con lo que el bebé aún se desesperaba más cuando lo ponía al pecho.
En resumen, después de un parto por cesárea de auténtica pesadilla, intenté hacer lactancia mixta, pero fracasé estrepitosamente. Al principio más o menos lo conseguí, pero tras unos meses sólo mamaba un poco por las noches, y al cuarto mes o poco más, ya ni eso. Y aun hoy, que hace casi 8 meses que nació, no puedo evitar llorar al recordar el día en que mi hijo nació, como nos trataron, y cómo pisotearon por completo su derecho a ser amamantado por su madre.
#quenoosseparen
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Hola buenos días, me gustaría contaros mi experiencia de parto en el hospital La Vega de Murcia. Este hospital que promociona su unidad de partos con el eslogan de “el parto que siempre soñaste!” es cualquier cosa menos un hospital respetuoso con las madres y mucho menos con los bebes. Os cuento:
Mi experiencia de parto en el hospital la Vega de Murcia fue sencillamente PÉSIMA. Sí, es cierto que habrá quien piense que ya me puedo dar con un canto en los dientes, de que tanto mi bebé como yo salimos vivos, pero no, no me vale, porque ni él ni yo salimos ilesos, en absoluto.
Vaya por adelantado que fue un embarazo complicadito, porque excepto diabetes gestacional, tuve tooooooooodas las molestias habidas y por haber , y también tuve contracciones desde casi el 5º mes. En especial fue muy molesto y doloroso la diástasis de la sínfisis púbica (separación anormal y excesiva del ligamento que une los dos grandes huesos de la pelvis), que creo que fue lo que causó que las contracciones fueran especialmente dolorosas. En fin.
A las 36 semanas, empecé a tener contracciones fuertes e incluso me dijeron en urgencias que el proceso ya se había iniciado, pero que aun podía tardar bastante. Sin embargo yo me notaba muy pero que muy rara un par de días antes de ponerme de parto y se lo dije a la ginecóloga, que yo creía que estaba a puntito. Ella me contestó con bastante desprecio que eso se lo llevaba diciendo desde el principio y que era una exagerada. Intentó reconocerme pero (no sé por qué ni siquiera pudo terminar porque me dolía una barbaridad!!. Estaba de 37 semanas.
Me mandó al hospital para que me provocaran el parto, pero no dio tiempo porque a los 10 minutos de entrar me empezaron las contracciones de parto. 20 minutos después las contracciones eran tan salvajes que había dilatado 7 cm y tenía contracciones prácticamente seguidas y muy, muy largas. Hasta ahí, quitando que nuevamente la epidural no me hacía efecto, y me quería morir con cada contracción, todo iba más o menos bien, pero entonces en el monitor vieron que el peque no estaba bien, que había sufrimiento fetal y había que hacer una cesárea de urgencia.
Me pasaron a quirógrafo y en cuanto el anestesista dio el ok, empezaron. No me dolía, claro, pero me notaba TODO, y tenía movilidad, de hecho el anestesista me preguntó si podía mover las piernas, yo probé y le dije que sí, entonces la ginecóloga empezó a gritar ¡¡ estate quieta!!! (solo había movido un poco una pierna) y el anestesista se disculpó y le dio a chorro a la anestesia, con lo que me puse a vomitar por efecto de tanta anestesia. Y ahí estaba yo, vomitando, intentando moverme lo menos posible porque la “ginecóloca” no dejaba de gritar que me estuviera quieta y que "no se lo estaba poniendo nada fácil!!", mientras, notaba como pegaban tirones y me movían por dentro para sacar a mi hijo. Cuando terminaron de "trajinar" conmigo, y de pesar y limpiar a mi bebé, en lugar de ponérmelo piel con piel o algo parecido, me lo enseñaron desde lejos y se lo llevaron (yo suponía que se lo llevarían a mi marido). Cuando terminaron de cerrarme y demás me explicaron que había sido una cesárea muy difícil, que me habían tenido q abrir más de lo normal, porque no podían sacar al bebé y que además me había desgarrado el útero por dos partes, con lo que me lo habían tenido que parchear con una red. Vamos, una epopeya!!
Me llevaron a observación para recuperarme y yo pensaba que cuando me recuperara un poco de la anestesia, me subirían con mi bebé. Pues no. Estuve hasta las 2 de la mañana allí (nació a las 8 de la tarde) y cuando me subieron a la habitación me dijo mi marido que sí, que lo había visto y le habían dejado DARLE UN BIBERÓN!! pero que se quedaba allí en el nido. Pregunté a las enfermeras si había algún problema y me dijeron que no, que estaba perfectamente, pero que el pediatra había dicho que se quedara allí, y allí se quedaba hasta que volviera a pasar el pediatra al día siguiente ¡¡!! Y allí me quedé yo llorando de dolor y de preocupación por mi bebé.
A mediodía del día siguiente pasó el pediatra (después de mucho insistir y mucho preguntar por él) y me dijo que lo había dejado en observación para que yo pudiera descansar, y porque al nacer tuvo un poco de problemas de respiración, porque el parto había sido muy duro también para él, pero que estaba perfectamente. Le dije que por favor me dijera si de verdad estaba bien porque no podía estar conmigo, y que además quería darle el pecho. Él contestó, que no fuera tonta, que así descansaba y que además ni siquiera tenía leche todavía, pero que si insistía.... !¡¡ me lo traía.
Pasaron casi 24 horas desde que nació hasta que pude tocarlo y abrazarlo, y por lo que me dijeron después, se pasó casi las 24 horas llorando encendido a todo llorar (según me dijeron porque tenía mucho carácter) y para cuando me lo trajeron ya le habían dado un montón de biberones y cuando lo ponía al pecho, lógicamente lloraba desconsolado porque no sacaba. Además tardé bastante más en tener la subida de la leche, con lo que el bebé aún se desesperaba más cuando lo ponía al pecho.
En resumen, después de un parto por cesárea de auténtica pesadilla, intenté hacer lactancia mixta, pero fracasé estrepitosamente. Al principio más o menos lo conseguí, pero tras unos meses sólo mamaba un poco por las noches, y al cuarto mes o poco más, ya ni eso. Y aun hoy, que hace casi 8 meses que nació, no puedo evitar llorar al recordar el día en que mi hijo nació, como nos trataron, y cómo pisotearon por completo su derecho a ser amamantado por su madre.
#elpartoesnuestro #violenciaobstetrica #quenoosseparen #partoenmurcia #unidaddepartoslavega #hospitallavegamurcia
https://www.hospital-lavega.es
Estimada Sra.:
Ante el motivo de su escrito publicado en EnFemenino el pasado día 9 Febrero 2017 en referencia a su experiencia en nuestro centro, indicarle que el hospital realiza un importante esfuerzo por cumplir el compromiso de atención con los máximos niveles de calidad y le indicamos que, si lo desea, puede ponerse en contacto con nuestro Servicio de Atención al Usuario para que podamos estudiar su caso y poder aclarar y tomar, en caso necesario, las medidas oportunas para mejorar nuestros servicios.
Atentamente Hospital HLA La Vega
Estimada Sra.:
Ante el motivo de su escrito publicado en EnFemenino el pasado día 9 Febrero 2017 en referencia a su experiencia en nuestro centro, indicarle que el hospital realiza un importante esfuerzo por cumplir el compromiso de atención con los máximos niveles de calidad y le indicamos que, si lo desea, puede ponerse en contacto con nuestro Servicio de Atención al Usuario para que podamos estudiar su caso y poder aclarar y tomar, en caso necesario, las medidas oportunas para mejorar nuestros servicios.
Atentamente Hospital HLA La Vega
Si ha de servir para que cambien su manera de atender a las madres y sobre todo a los bebes, con mucho gusto me pondré en contacto con ustedes. Si bien dudo bastante que repercuta de verdad en que cambien lo que las mismas enfermeras me confirmaron que era el protocolo de actuación en un parto por cesárea.
En realidad yo ya no puedo volver atrás , pero me interesa mucho que se sepa lo que me pasó a mí, porque cuando buscaba información sobre los partos en La Vega para decidir donde iba a parir no encontré practicamente nada. Ojalá hubiera encontrado más información. Y ojalá hubiera ido a la Arrixaca o al hospital de Torrevieja, donde tuve a mi hijo mayor. Nada que ver!!!
Hola buenos días, me gustaría contaros mi experiencia de parto en el hospital La Vega de Murcia. Este hospital que promociona su unidad de partos con el eslogan de “el parto que siempre soñaste!” es cualquier cosa menos un hospital respetuoso con las madres y mucho menos con los bebes. Os cuento:
Mi experiencia de parto en el hospital la Vega de Murcia fue sencillamente PÉSIMA. Sí, es cierto que habrá quien piense que ya me puedo dar con un canto en los dientes, de que tanto mi bebé como yo salimos vivos, pero no, no me vale, porque ni él ni yo salimos ilesos, en absoluto.
Vaya por adelantado que fue un embarazo complicadito, porque excepto diabetes gestacional, tuve tooooooooodas las molestias habidas y por haber , y también tuve contracciones desde casi el 5º mes. En especial fue muy molesto y doloroso la diástasis de la sínfisis púbica (separación anormal y excesiva del ligamento que une los dos grandes huesos de la pelvis), que creo que fue lo que causó que las contracciones fueran especialmente dolorosas. En fin.
A las 36 semanas, empecé a tener contracciones fuertes e incluso me dijeron en urgencias que el proceso ya se había iniciado, pero que aun podía tardar bastante. Sin embargo yo me notaba muy pero que muy rara un par de días antes de ponerme de parto y se lo dije a la ginecóloga, que yo creía que estaba a puntito. Ella me contestó con bastante desprecio que eso se lo llevaba diciendo desde el principio y que era una exagerada. Intentó reconocerme pero (no sé por qué ni siquiera pudo terminar porque me dolía una barbaridad!!. Estaba de 37 semanas.
Me mandó al hospital para que me provocaran el parto, pero no dio tiempo porque a los 10 minutos de entrar me empezaron las contracciones de parto. 20 minutos después las contracciones eran tan salvajes que había dilatado 7 cm y tenía contracciones prácticamente seguidas y muy, muy largas. Hasta ahí, quitando que nuevamente la epidural no me hacía efecto, y me quería morir con cada contracción, todo iba más o menos bien, pero entonces en el monitor vieron que el peque no estaba bien, que había sufrimiento fetal y había que hacer una cesárea de urgencia.
Me pasaron a quirógrafo y en cuanto el anestesista dio el ok, empezaron. No me dolía, claro, pero me notaba TODO, y tenía movilidad, de hecho el anestesista me preguntó si podía mover las piernas, yo probé y le dije que sí, entonces la ginecóloga empezó a gritar ¡¡ estate quieta!!! (solo había movido un poco una pierna) y el anestesista se disculpó y le dio a chorro a la anestesia, con lo que me puse a vomitar por efecto de tanta anestesia. Y ahí estaba yo, vomitando, intentando moverme lo menos posible porque la “ginecóloca” no dejaba de gritar que me estuviera quieta y que "no se lo estaba poniendo nada fácil!!", mientras, notaba como pegaban tirones y me movían por dentro para sacar a mi hijo. Cuando terminaron de "trajinar" conmigo, y de pesar y limpiar a mi bebé, en lugar de ponérmelo piel con piel o algo parecido, me lo enseñaron desde lejos y se lo llevaron (yo suponía que se lo llevarían a mi marido). Cuando terminaron de cerrarme y demás me explicaron que había sido una cesárea muy difícil, que me habían tenido q abrir más de lo normal, porque no podían sacar al bebé y que además me había desgarrado el útero por dos partes, con lo que me lo habían tenido que parchear con una red. Vamos, una epopeya!!
Me llevaron a observación para recuperarme y yo pensaba que cuando me recuperara un poco de la anestesia, me subirían con mi bebé. Pues no. Estuve hasta las 2 de la mañana allí (nació a las 8 de la tarde) y cuando me subieron a la habitación me dijo mi marido que sí, que lo había visto y le habían dejado DARLE UN BIBERÓN!! pero que se quedaba allí en el nido. Pregunté a las enfermeras si había algún problema y me dijeron que no, que estaba perfectamente, pero que el pediatra había dicho que se quedara allí, y allí se quedaba hasta que volviera a pasar el pediatra al día siguiente ¡¡!! Y allí me quedé yo llorando de dolor y de preocupación por mi bebé.
A mediodía del día siguiente pasó el pediatra (después de mucho insistir y mucho preguntar por él) y me dijo que lo había dejado en observación para que yo pudiera descansar, y porque al nacer tuvo un poco de problemas de respiración, porque el parto había sido muy duro también para él, pero que estaba perfectamente. Le dije que por favor me dijera si de verdad estaba bien porque no podía estar conmigo, y que además quería darle el pecho. Él contestó, que no fuera tonta, que así descansaba y que además ni siquiera tenía leche todavía, pero que si insistía.... !¡¡ me lo traía.
Pasaron casi 24 horas desde que nació hasta que pude tocarlo y abrazarlo, y por lo que me dijeron después, se pasó casi las 24 horas llorando encendido a todo llorar (según me dijeron porque tenía mucho carácter) y para cuando me lo trajeron ya le habían dado un montón de biberones y cuando lo ponía al pecho, lógicamente lloraba desconsolado porque no sacaba. Además tardé bastante más en tener la subida de la leche, con lo que el bebé aún se desesperaba más cuando lo ponía al pecho.
En resumen, después de un parto por cesárea de auténtica pesadilla, intenté hacer lactancia mixta, pero fracasé estrepitosamente. Al principio más o menos lo conseguí, pero tras unos meses sólo mamaba un poco por las noches, y al cuarto mes o poco más, ya ni eso. Y aun hoy, que hace casi 8 meses que nació, no puedo evitar llorar al recordar el día en que mi hijo nació, como nos trataron, y cómo pisotearon por completo su derecho a ser amamantado por su madre.
#elpartoesnuestro #violenciaobstetrica #quenoosseparen #partoenmurcia #unidaddepartoslavega #hospitallavegamurcia
https://www.hospital-lavega.es
Hola
Es una situación fea... pero quizá algunas cosas las hicieron por necesidad. A mi madre le hicieron cesarea en la s.social.. y por complicaciomes respiratorias tmbien.. no les dejaron verme hasta casi dos dias. porq estuve en la incubadora y conectada a unos aparatos para respirar. A veces los medicos tienen q seguir el protocolo ante las complicaciones que surjan. y ellos no siempre tienen la culpa de que el parto se complique. yo pienso que tuviste mala suerte, como otras muchas mujeres. A veces pasa...
Buenas: Respondo porque me pasó comoa ti, no encontré experiencias ni opiniones sobre el parto en la Vega, y creo que esto puede ayudar a futuras mamás. Tuve a mí primera hija en 2015, ginecóloga maja, optimismo, buena preparación física (hice natación para embarazadas, caminaba una hora al día...), clases de preparación con Salvador Grau... En fin, todo iba a salir de maravilla. Le pregunté a la maja de mi ginecóloga si hacía plan de parto, y me contestó que para qué, si lo que yo quería era lo más normal (piel con piel, corte tardío del cordón...) Toda confiada rompo aguas y me voy feliz al hospital. Primeriza e ingenua, la cosa va lenta y la matrona, que tiene mucho sueño, me pincha un medicamento para "reiniciar" el parto pq las contracciones no son "productivas". Yo sólo pregunté si afectaba al bebé porque confiaba en su criterio profesional. Y claro que lo reinició... Como había roto la bolsa y aquéllo ya no progresaba oxitócicos y sueros al canto, por supuesto monitores el 100% del tiempo, totalmente inmovilizada durante horas con contracciones durísimas y una nueva matrona de manos enormes y carácter agrio. Un tacto tras otro, dolor y frustración por no dilatar. 25 horas después de romper aguas me sugieren epidural para "ayudarme" y accedo. Y vaya si me ayudaron. En definitiva, cada intervención llevó a otra, y a otra... Al final súper episiotomía y ventosa, pasando por Kristeller, y salir dando las gracias por no haberme hecho una cesárea.9 meses después todavía no podía tener relaciones sin dolor, y un año después estaba con rehabilitación del suelo pélvico. El segundo lo tuve hace 3 meses. Presenté plan de parto, leí mucho y me preparé mejor, y cuando tocamos el timbre del paritorio nos abrió la misma matrona agria. Casi me vuelvo a casa, pero mi marido me convenció,menos mal pq parí dos horas después, de manera completamente natural, sin epidural, sin más intervenciones, en una situación un poco tensa para todos pues yo ya no quería que nadie me tocara ni "invadiera" y me puse borde defendiendo mi plan de parto y mi derecho a elegir cómo parir puesto que todo estaba dentro de la normalidad. Los paritorios nuevos son preciosos, y la jefa de matronas es un cielo, pero en mi experiencia he vivido cómo el resto -incluida la maja de mi ginecóloga que volvió a tirar del cordón pese a mi negativa expresa en el plan de parto- pretende perpetuar unos protocolos que les hacen más fácil su trabajo: "tú tumbadita y calladita que nosotros podamos hacer lo que queramos". Eso sí, con mucha educación.
Por cierto, esta vez ni un punto, ni una molestia, una recuperación increíble. Dos horas después de parir estaba comiéndome un bocata sentada "a lo indio" en la cama de la habitación y con una satisfacción inmensa por haber sentido todo y haber disfrutado de un proceso que la primera vez me robaron, a pesar del dolor. Creo que es importante el plan de parto, es un documento legal que, aunque flexible, deben respetar en la medida de lo posible. A mí me dio mucha seguridad.
Si ha de servir para que cambien su manera de atender a las madres y sobre todo a los bebes, con mucho gusto me pondré en contacto con ustedes. Si bien dudo bastante que repercuta de verdad en que cambien lo que las mismas enfermeras me confirmaron que era el protocolo de actuación en un parto por cesárea.
Hola, yo tuve a mi hijo en La Vega en enero de 2018, despues de mucho intentarlo terminó en cesarea, a mi sí me respetaron que mi marido estuviera con el niño mientras yo estaba en REA, en cuanto terminaron de coserme y hablaron con mi marido le llevaron al nene a la habitación, hicieron piel con piel y nadie le dio ningun bibe, mi cesarea no tuvo complicaciones y en 3 o 4 horas me pudieron llevar a la habitación con ellos.
El nene nació perfecto, quizá esa sea la diferencia entre que lo dejen vigilado en el nido o con el papá en la habitación.
En cambio si le tuvimos que dar varios bibes al día siguiente por otros motivos y sin embargo yo si conseguí una lactancia estupenda con la que aun continúo...creo que no es determinante que durante 24 horas el peque tome bibe para establecer o no una buena lactancia, hay asesoras estupendas que hacen milagros
Mi ginecólogo fue el Dr. Magnelli y repetiré con él en el próximo embarazo.
Creo que independientemente del hospital donde des a luz depende mucho del aquipo con el que te encuentres ese día y las circunstancias únicas de cada parto.
Siento que hayas tenido esa mala experiencia.