Tranquila que es lo normal
ahora que empeizan a "ser independientes" (que andan ellos solos), ven que pueden descrubir ellos mismos todo lo que hay a su alrededor y, claro, pues no paran.
Mi hijo tiene año y medio y no está quieto más que para comer (y a veces ni eso) y dormir. Aunque acabo destrozada cada día, pienso que es lo normal y que cuando crezca se irá tranquilizando. La verdad es que yo me preocuparía si mi hijo no fuese así, ya que su forma de ser lo único que demuestra es que es curioso (todo quiere descubrirlo, tocarlo, cogerlo, probarlo...) y que tiene energía para poder hacer todo eso que quiere.
Lo dicho, que si fuese al contrario, sí que me preocuparía...
Muchos besos y paciencia! jejeje