No por el placer del acto abortivo en sí, mas sí por dos placeres, uno previo y uno posterior:
a) El placer de ...
b) El placer de vivir años sin un crío estorboso
No le hagamos caso al famoso cliché que dice: "Ninguna mujer aborta por gusto; no sabemos lo que las haya obligado a tomar una decisión tan trágica, la cual no debemos hacer todavía más trágica, por lo que no debe penalizarse el aborto".
Pamplinas: sólo la amenaza de cárcel disuadirá a esa gentuza egoísta de tomar una decisión criminal filicida.