No estoy contenta con mi pediatra. Mi hijo tiene 2 años y siempre ha sido muy sanote. Pero desde que empezó la guarde, ha cogido de todo, cosa que me esperaba: 3 faringitis, 2 laringitis, 1 conjuntivitis, 3 otitis, 1 infección vírica en la garganta (eso.... es faringitis o que es?), ... más los eternos mocos. La última otitis enlazó con la última laringitis, o sea, me dijeron que tenía laringitis cuando todavía estaba en los últimos días de tomar el antibiótico para la otitis. Con la laringitis, me dijeron que 3 días con Estilsona. Al tercer día lo llevé, porque estaba peor, y me dijo la pediatra que seguiríamos el tratamiento, pero que luego había que bajarlo poco a poco, reduciendo la dosis a la mitad cada 2 días. Total, que acabamos con las gotas hace 2 días, y está peor de la tos. Yo ya no sé qué hacer. De hecho, a su hermano de 2 meses, le ha pegado la última laringitis. Y ahora que está otra vez con tos, fui a la pediatra porque por la noche se ahogaba, y el crío, según ella, está bien. Y ella misma me preguntó por el mayor, y le conté que seguía igual o peor, y no me da solución, se queda tan ancha. Para los mocos nunca me ha mandado nada, ni mucolíticos ni nada, sólo lavados nasales. Y al final, esos mocos se le iban a la garganta, al oído... a todo. Según ella, es el síndrome de la guardería, y no se puede hacer nada.
Yo entiendo poco de enfermedades de los niños, y a la fuerza me tendría que hacer una experta, pero veo a mi hijo que, aparte de pillarlo todo, se va a quedar con esa tos todo el invierno y que la pediatra no haga nada... No sé si quedarme conforme porque esto tiene que ser así o qué. Es que ya se me cae el alma a los pies, porque no levanta cabeza.
¿De verdad que esto tiene que ser así?