Se trata de una carta de un pediatra que ha publicado el Diari de Menorca, es un pediatra que ha pedido traslado a la peninsula, y os voy a resumir el trozo que me ha gustado mas:
Se titula "Adeu" (adiós)
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Sorprenderá que escriba en castellano para despedirme: es porque vuelvo, porque regreso, porque vuelvo a la lengua materna para decir que me voy. Con el corazón arrugado...
Las cosas importantes se hacen así, con la guia infalible de la intuición. cuántas veces dije, en la pública intimidad de una consulta, que una madre confíe en sí misma, que el instinto, que la intuición no falla, no se equivoca.
Me voy, pero no me voy con las manos vacías. Me llevo el tesoro más grande: la sonrisa se muchos niños. Son mías, son sonrisas que me he ganado, son mías y me las llevo. Son el tesoro más valioso, que no se puede comprar, que se gana... Me lo llevo orgulloso, es mío...
Entonces me pregunto: si me llevo un tesoro, ¿qué dejo a cambio? Dejo obsesiones. La obsesión de mimar a los niños. Porque se pasa todo tan rápido, tan rápido atraca el barco que busca los pasajeros de regreso. Mimar a los niños significa acunarlos en brazos interminables, cantarles las canciones de siempre, jugar con ellos horas sin reloj, escuchar qué dicen y adivinar qué no dicen. Mimar significa mirar y admirar la belleza insondable del sueño infantil, la placidez inmensa del bebé que toma feliz el pecho, la boca golosa y los ojos ávidos de quien toma el biberón. Mimar significa cambiar una tarde de televisión por una tarde de jugar al corre que te pillo; significa cambiaar una película por un relato o un cuento o una historia de la familia. Mimar significa estimular la conversación en la mesa familiar, significa interrogar con una mirada: significa buscar el diálogo que intenta comprender hasta lo incomprensible. Mimar significa también, poner un límite, una frontera...
Mimar a los niños significa también preguntarles qué te pasa, dónde te duele, qué te quita la alegría. Menorca es nombre de mujer, es nombre de madre. Cuida de tus niños, Menorca, mímalos ahora que puedes. Al menos para que ellos te cuiden y te mimen cuando seas vieja y ya no te quieran los turistas, y tengas miedo de ahogarte en la mar bravía...
Jorge Bello
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Chicas, sé que es largo pero al leerlo me ha hecho llorar... ¡es tan bello como su nombre! y me hubiera gustado tanto tenerlo como pediatra de Inés... que ahora me da pena no haber sabido de él antes.
Un beso y buenas noches
Ines y Ines - 10 meses y 4 días