Mi caso... y el de mi amiga
Yo no anduve hasta los 16 meses. Y, según dice mi madre, jamás gateé. Pero ella siempre se fió de su pediatra que le decía que cada niño tenía su tiempo y que como no había ningún problema físico...
Tengo una amiga que a los 16 meses ni tan siquiera se ponía de pie. Ella era gordita y su abuela, a pesar de lo dicho por el médico, se autoconvenció de era tonta. Así que prometió a la Virgen de Lourdes que si su nieta andaba, haría allá su primera comunión. Y mi pobre amiga, con sus ocho años y vestida de novia diminuta, recuerda su primera comunión entre señores tullidos en una fila larga, larga.
Así que no te preocupes, ya te hubieran dicho algo