Hola a tod@s:
¿qué opinan vosotros de esto?
A ver, por donde empezar...decir que mi hija recién ha entrado al colegio por primera vez, llegados allí descubrimos que compartiría clase con una de sus antiguas compañeras de guardería, cosa que nos tranquilizó porque creíamos que ayudaría con la adaptación. Bien, por las tardes ella juega a que es la maestra, y me parece ver reflejados en ella muchos de los gestos de su maestra de verdad, una persona que no conozco a plenitud pero que nos dió buena impresión cuando la conocimos. Pero centra su juego en reñir a los niños imaginarios, con tantísimo carácter ofreciendoles penalizaciones incluso con contestaciones violentas. Y me temo, y a este nivel me preocupo, de que pueda ser un reflejo de lo que ella misma presencia en el día a día. No lo sé. No lo parece, no veo niños asustados por la mañana, hombre, lloran algunos, lo normal, que no tienen ni dos meses desde que empezaron. Por otra parte, esta su amiga, pareciera que es la única que va a la clase, no para de hablar de ella, juega con ella siempre cuando no es la "maestra", está con ella, a un punto de que tenemos que tratarla como otra más en casa, la otra noche dejó la luz encendida de su cuarto porque su amiga estaba allí leyendo cuentos y no había quien pudiera apagarla, su amiga no se podía quedar a oscuras. Bueno, siempre intento hablar de sus otros compañeros, la invito a hacer nuevos amigos pero no sé si es porque ya la conocía de antes o pareciera mentira, sea porque congenian a la mil maravillas -para mí ¿desgracia?-. Al principio recibía quejas de su maestra porque son un tándem de temer. Ambas posesivas, celosillas, tremendas, inquietas, risas a carcajadas y no sé qué más. Lo último que supe es que mi hija le pega a esta niña si la ve jugar con otros. Y dicho todo esto, es cuando ya no sé como afrontar el tema, los temas que cómo verán son dos en uno y que se originan en el cole, ese mismo del cual yo hablaba hace poco como el sitio donde mami no controla.
Al ser una niña con tanta personalidad -tantísima personalidad al punto que nos puede- no podemos aunque quiséramos darle un ambiente de absoluta armonía rosa, por supuesto que la reprendemos, dialogamos con ella continuamente antes de ejercer la fuerza, intentamos las negociaciones, hemos dado cachetes, hemos pegado gritos en el cielo en momentos de extrema desesperación, no voy a decir que no sé de dónde pueden salir esas demostraciones de severidad y castigos pero me parecen exageradas ya y creo que tengo que intervenir.
Bueno que me extiendo, según me vayan hablando podré añadir más. Muchas gracias de antemano por sus aportaciones.
Un saludo.
). Solo quería jugar con ella y no consentia que nadie más de la clase se acercase a ella, la pegaba y en fin, la tenía amargada. Ahora mismo la relación es menos turbulenta y está muchísimo más tranquilo.
