Hola, Os cuento un poco mi historia, espero poder ayudar a alguien. El año pasado me quedé embarazada, la verdad es que hacía tiempo que quería ser madre pero mi pareja no lo tenía muy claro, hasta que finalmente se decidió, y después de pocos meses nos quedamos. Todo fue como un sueño des del principio, yo me encontraba bien, estaba feliz, qué digo? super feliz! Mi pareja se había ilusionado mucho y nos había unido aún más. Todo el embarazo transcurrió con normalidad, la gente siempre me recordaba lo afgortunada que era por que fuera todo tan bien, aunque a mi no me hacía falta, sabía de sobras la suerte que tenía. Así pues, pasamos 8 meses de ensueño, preparando todo, ilusionándonos cada vez más y siendo cada día un poco más felilces. Hasta que llegaron los 8 meses. Ese día me levanté, y tal como lo hice rompí aguas, hasta ahí todo normal, fuimos rápido al gine y nos mandó al hospital. Seguimos con nuestra aura de felicidad hasta el hospital, y todo tan normal. Me ingresaron y me dijeron que ese mismo día ya tendría a mi pequeño con nosotros, ya estaba dilatando. De golpe, el corazón de mi bebé empezó a parpadear muy despacio, y sus constantes bajaban cada vez más. Me hicieron una cesaria de urgencia. Todo fue bien, y salió adelante. Seguimos con normalidad, y fuimos ya los tres a la habitación. Pasamos todo el día, yo un poco dormida por la anestesia y dolorida por la cesarea. El niño estaba bien, aunque le costaba un poco respirar con normalidad, por ese motivo se lo llevaron a mirar que podía ser. Al poco rato volvió la enfermera y empezó el infierno. De golpe, se rompió algo en mi corazón que me indicaba que las cosas no iban a ir bien. Pasó la noche en la incubadora ( me dijeron que le pondrían oxígeno para ayudarlo a respirar puesto que parecía que sus pulmones no estaban suficientemente maduros). Imaginaros cómo pasé la noche, mi pareja y yo estabamos destrozados, no entendíamos nada. A primera hora de la mañana vino una pediatra que ya nos dijo que la cosa no pintaba bien, el niño tenía los pulmones muy débiles y tenían que hacerle muchas pruebas. Fueron dos días de total infierno, lo peor con diferencia de mi vida, no puedo describir esa sensación, de no saber qué hacer, de no saber si saldrá adelante... permitirme que me lo ahorre, duele mucho. Finalmente, al cabo de dos días de nacer, mi pequeño se nos fue. Se había infectado del virus estreptococo galactiae y no pudo salir adelante. Hay una probabilidad ínfima de que pase, pero nos tocó, y sobretodo le tocó a él. Era mi ilusión y se me fue, y con él, no os mentiré se fue un trozo de mi, que por mucho que me recupere, sé que no volverá. Después de esto, todo fue oscuridad, la tristeza más absoluta y profunda que una persona puede sentir, vacío... Y meses y meses de pensar que ya nunca podría a volver a sonreir.
A todo esto, añadir que esta situación nos unió de una manera absoluta con mi pareja y que de hecho, creo que es uno de los motivos principales por los que no me quedé ahí. Sin olvidar la maravillosa familia y amigos que me rodean.
Los primeros meses fueron horribles, el tiempo no pasaba y cada día al despertarme quería volver atrás, no entendía porque había pasado eso y me parecía imposible seguir adelante. Pero, aunque odio los tópicos, tengo que reconocer, que lo de "el tiempo todo lo cura" aún no siendo del todo cierto, ayuda. Y poco a poco fui retomando algunas de las cosas que hacía. Volví al trabajo y en ocasiones, a sonreir.
Nos apareció la oportunidad de comprarnos una casa antigua para restaurar, y el proyecto no ayudó, y a día de hoy todavía nos ayuda, muchísimo. Nos volvió a acercar a la ilusión, y a mantener la cabeza por unos momentos distraída.
Así hemos pasado casi un año, este sábado una luz muy especial nos volvió a iluminar, nos removió todos estos sentimientos y una sensación muy especial nos invadió de nuevo. Llevábamos algunos meses intentado quedarnos de nuevo, y el test finalmente lo confirmó este fin de semana. Es una mezcla de sentimientos muy fuerte, pero en definitiva eso es la vida no?
Vuelve a girar la rueda y espero que todo vaya bien, no os engañaré y os confieso que estoy muerta de miedo, aunque me haga la valiente, pero bueno, supongo que es normal y toca ser positivas.
Espero haber podido ayudar a alguien, he escrito porque cuando me pasó todo, en estos foros encontré historias que me ayudaron a tirar adelante.
Un abrazo a todas, y adelante, siempre adelante!
