Yo estoy ahora en ello
Mis niños tienen 32 meses y estoy en plena operación pañal. Lo intenté este verano, y nada de nada, y fue la profe de la guardería la que me indicó que lo intentara de nuevo ahora, y parece que va un poco mejor. La niña mucho mejor que el niño, pero el leido que a los varones les cuesta más, y que la caca se controla peor.
Pero no te preocupes, me imagino que la profe de mis niños, que lleva muchos años trabajando en una guardería tiene experiencia y me dijo que unos niños lo piden antes que otros y que me quedara tranquila, que se suele empezar entre los dos años y tres.
Te todas formas aquí te pongo un artículo médico:
APRENDIENDO A CONTROLAR ESFINTERES
Dr. Elías Jiménez F.
Una de las muchas cosas que el niño debe aprender durante su desarrollo, es el control de los esfínteres, o sea la capacidad de orinar y defecar voluntariamente en el momento apropiado y en el sitio correcto, el inodoro o la basenilla.
Aunque muchos padres quisieran que desde muy corta edad el niño deje los pañales y avise cuando quiere ir al baño, esto no es posible ni conveniente antes de los dos años de edad.
Antes de los años 60, la tendencia era entrenar a los niños en forma compulsiva, y empezar desde muy corta edad, en ocasiones antes del año, lo que ocasionaba con frecuencia trastornos de personalidad en los niños, estreñimiento, y algunos problemas más complejos. La tendencia se fue modificando, y se empezó a utilizar el abordaje propuesto por Brazelton, o sea un entrenamiento orientado hacia el niño, con estímulos positivos y no punitivos, y empezando a los dos años de edad.
Sin embargo, a pesar de este manejo más racional, un 20 % de los niños no aceptan el entrenamiento, y son incapaces, aún a los 3 años, de controlar voluntariamente sus esfínteres, lo que provoca conflictos familiares frecuentes. Aún más, en algunos estudios se reporta que hasta un 10% de los niños tienen problema para defecar voluntariamente a la edad de 4 años.
Es más frecuente que los niños con dificultad para entrenarse sean varones, que tengan hermanos menores y que rehusen sentarse en el inodoro, y por otra parte, no influye el hecho de que la madre trabaje o que estén en una guardería.
En resumen, el entrenamiento del niño debe iniciarse cerca de los dos años de edad, debe ajustarse a las necesidades de cada niño, respetando su propio paso, y no debe ser punitivo o forzado, sino más bien orientado hacia los aspectos positivos.
Cuándo debemos preocuparnos?, y cuándo debemos consultar al pediatra?
En primer lugar tenemos que tomar en cuenta la edad del niño. Si no hemos logrado que el niño se entrene a los 3 y medio años ( 42 meses de edad) es conveniente solicitar ayuda, para asegurarnos así que estemos haciendo las cosas bien.
La segunda razón para consultar es la retención de materia fecal, lo que a menudo provoca estreñimiento importante, impactación fecal y falta de control de los esfínteres, con defecación casi constante, en pequeñas cantidades, lo cual realmente afecta a los niños y a sus padres.
En estos casos con problema, el papel del pediatra puede ser muy importante, existiendo medidas efectivas que podrían tomarse, analizando cada caso en forma individual, y que podrían ir desde el regresar a los pañales por algunos meses, con lo cual muchos niños normalizan su situación, hasta el uso de terapias condicionantes que modifiquen el comportamiento de los niños.