aborto, superado pero no olvidado

HOLA A TODAS.
HACE MUCHO TIEMPO QUE NO VENGO POR AQUI. HE SIDO MAMA OTRA VEZ Y HE TENIDO MUCHO TRABAJO. BUENO EL BEBE YA TIENE 18 MESES, PERO ES QUE NO HE PARADO DE TRABAJAR, APARTE DEL BEBE Y DE MI HIJO MAYOR. SON MIS NIÑOS Y ESTOY ENCANTADA CON ELLOS. SON MI VIDA.

HACE CASI TRES AÑOS TUBE UN ABORTO Y ME AUTOESCRIBI UNA CARTA PARA EXPRESAR MIS EMOCIONES, ME AFECTO MUCHO LA PERDIDA, ESTUBE MUCHO TIEMPO HUNDIDA, DESOLADA... BUENO SI LO HABEIS PASADO YA LO SABEIS.
PASADO EL TIEMPO Y CON MI SEGUNDO HIJO, HE VUELTO A LEER ESA CARTA QUE ME ESCRIBI, Y HE RECORDADO A MI ANGELITO, Y QUISIERA VOLVER A COMPARTIRLA CON VOSOTRAS, DESPUES DE MI SEGUNDO HIJO, LO HE SUPERADO PERO NO LO OLVIDO, NI LO OLVIDARE NUNCA.
A LAS QUE LO ESTEIS PASANDO MAL, OS DOY MUCHO ANIMO, ES DURO, MUY DURO.
ESTA CARTA ME SIRVE PARA AYUDARME A SUPERARLO, PARA RECORDAR A MI ANGELITO Y PARA LLORARLE.
MUCHO ANIMO, SE QUE ES DIFICIL, PERO CON EL TIEMPO...
TENEIS UN ANGELITO ALLI ARRIBA, Y EL TIENE TODO VUESTRO AMOR.


MI BEBE, MI NO BEBE.

Tres meses, tenías.

No llegaste ha hacerte notar, no pudiste. En la cena de nochevieja ya no estabas y yo no lo sabía.

- Domingo día 11 de enero, empiezo a sangrar, tu señal para mi de que ya no estabas.
Lunes día 12 de Enero, tras haber transcurrido la mañana y no dejar de sangrar me voy al hospital. Papa me dice que me acompaña, pero como con tu hermanito pasó lo mismo y no paso nada, le dije que no pasaba nada que me iba yo sola. Y me fui.



Llegué al hospital , había mucha gente , pero por la gravedad me pasaron la primera.
Después de una serie de preguntas me llevaron a ginecología y paritorios, La ginecóloga me hace una ecografía y...
Como pasó con tu hermanito , yo esperaba que me dijeran lo mismo , tranquila no pasa nada todo está bien. Pero me dicen, es un aborto
Nooooooo! dije yo entre lágrimas.

Después de consolarme me preguntan: ¿te lo quitamos ahora o mañana en ayunas?
Allí desnuda con las piernas en alto...
No lo sé... no me había pasado nunca y era horrible.
Decidieron que me lo quitarían por la mañana a primera hora en ayunas, pues era demasiado grande para yo poder expulsarlo.


- Me voy, llamo a papá y le digo que tu ya no estás, llorando me voy a casa. Quería echarme un ratito en la cama pero no podía parar de llorar. Ayer estabas y hoy ya no estás. Horrible.


Me paso dos horas llorando sin consuelo. Voy a buscar al tete que viene del cole. Mama llora, dice, si cariño mama llora.
Sin poder hablar y llorando empiezo a enviar mensajes. A mi tía, a mi hermana, a mis primos, a mi mejor amiga...
Empiezan a llamarme, y no puedo mediar palabra.
Llega papá pronto hoy a casa para estar conmigo y con el tete. Y empiezo a tener unos dolores horribles que van subiendo en intensidad. Le digo a papá que coja el, el teléfono pues entre llorar y los dolores tan fuertes no puedo ni hablar.


- Ya no querías estar más conmigo. A las diez de la noche ya empezabas a abandonarme.
Llevamos al tete con la tía, y papá y yo nos vamos al hospital.


Cuando llegamos los dolores eran insoportables y me dijeron que sería como un parto pero sin anestesia. Sangrando a borbotones, con unos dolores horribles, sucia por la perdida de tus líquidos, no me pueden dar nada hasta que no tengan el resultado de los análisis.
Me ponen suero salino, y al cabo de dos horas me ponen calmantes. Con tres goteros de calmantes y los dolores no se van. Prefiero cincuenta cesáreas que los dolores de un aborto. La cama llena de sangre.

Cuando por fin están los análisis me suben a planta a la una o las dos de la mañana.
Continuamente me vigilan, y por fin entra la ginecóloga y me explica que: te haremos un legrado por la mañana.

Se me calman un poquito los dolores, y goteros y más goteros. En ayunas, sucia, sin ropa, y con empapadores, paso la noche y la mañana, hasta que a media mañana viene la ginecóloga y me explica que es un legrado. Es una aspiración con cánula en la cual se aspirarán los restos y el bebe, tiene que ser así pues es demasiado grande para que pueda expulsarlo yo. Conlleva unos riesgos, se puede perforar la pared del útero, puede haber hemorragia ... No pude escuchar más. Lloré.

Me llevan a quirófano. No puedo evitar llorar. La enfermera me tapa, y me dice tranquila estás tapada, no llores, todo irá bien. Yo le digo: estoy sucia. Tranquila (me dice) estamos aquí para ayudarte no te preocupes de nada, ¿tienes sueño?... y ya no recuerdo nada más.


- Me despiertan, y tu ya no estás, pregunto por ti y me dicen que, lo tienen que analizar, que te llevan al anatómico.
Estoy vacía , hundida.

¿Donde voy a llorarte?, te quería, pensaba mucho en ti, mi pequeño angelito ahora.
En algún bote de laboratorio.

Adiós el 13 de Enero y adiós el 31 de julio, fecha en la que estarías con nosotros. Entre mis brazos. Si, duele y mucho, mucho.

Azul o rosa no lo sé, pero te había soñado en navidades, que salías de mi tripita en rosa y tan pequeño/a que cabías entre mis dos manos. Entonces pensé, será niña y prematura, pero no, no es prematura, es que te ibas, me decías adiós.

Lo más horrible que me ha pasado nunca. Te he llorado mucho y lo sigo haciendo, duele...mucho. Me duele el alma. Psicológicamente muy duro.

Estoy mejor cariño, el tete y papá están conmigo y me dan cariño. No podré nunca olvidarte. Mi angelito.

Te escribo esta carta a ti bebe para poder llorar mi pena, para tener algo entre mis manos mientras te recuerdo y para acordarme lo que sufrí por ti, porque no quiero olvidarte ,y aunque este recuerdo sea doloroso y horrible, quiero recordarlo.



Será cruel esta carta pero es mi forma de desahogarme, mi terapia.

He hablado con gente que les ha pasado lo mismo, y coinciden en lo mismo conmigo, en lo horrible que es sobre todo con tres meses de embarazo. Que si es de poquito tiempo ni te enteras casi, pero con tres meses es muy desagradable.

La matrona me ha dicho que llore, que lo haga cuanto quiera, que es mi pena, mi duelo y que lo debo pasar yo, que nadie lo puede pasar por mi , que solo yo sé la pena que tengo, y que nadie me diga cuando tengo que dejar de llorarte, que hay gente que no lo entiende porque nunca lo han pasado.

¿como estás? me preguntan... Mal, hundida, vacía, que les digo?. Hay que pasarlo para saberlo, dice la matrona.

Ahora veo las cosas diferente. Y hay mucha gente en el mundo que lo pasa mal, muy mal. Niños desamparados sin padres, con hambre, explotados, esclavos de todo tipo... Los pequeños problemas ya no me hacen pensar.


- Te quería de verdad. Tenía tanto amor para ti. No naciste pero estuviste ahí conmigo, poquito, pero viviste conmigo.

No quiero despedirme de ti, quiero recordarte y lo haré siempre. Fuiste parte de mi y eso no lo olvidaré nunca.

Me has cambiado la vida sin ni siquiera nacer.

Angelito mío.

Tu mamá.