Hay muchos mitos...
Respecto a eso. Dicen que puede cambiar el sabor de la leche. Pero en realidad la leche que fabricas es una cosa viva.
No es como la de las vacas que siempre sabe igual porque solo comen pienso.
El bebé, así se acostumbra a los nuevos sabores.
Además, dicen que el líquido amniótico también puede variar el sabor según lo que comemos, por lo tanto, si en la barriga no se quejaba, tampoco se quejará de la teta.
Yo he comido ajos alcachofas y espárragos y voy a seguir comiendo lo que me de la gana ya que pienso prolongar la lactancia y no quiero amargarme.
(Bueno, lo que me de la gana no, que hoy he empezado la dieta )
Núria+Carles