Bueno, pues ¡ya soy Mami! Mucha suerte a todas las que ya les quede poquito.
Día 5 de septiembre a las ocho me ingresaron para cesárea programada. Comprobaron con una eco si Inés se había decidido a última hora, pero no. Así que a las 12 me bajaron a quirófano y a las 12:45 había nacido la pequeñaja. De la operación nada que decir, todos super amables, me iban explicando lo que iban haciendo e incluso había alguna que otra broma. A la niña ni la oí llorar. Me enteré de que se la habían llevado porque pregunté si faltaba mucho para que saliera y me lo dijeron, que ya estaba con el pediatra. Al cabo de 15 minutos vinieron para enseñármela. Ni qué decir que es un momento único.
Estuve en sala de recuperaciones solita como cuatro horas. En teoría eran dos, pero me entró muchísimo picor por todo el cuerpo, como si tuviera urticaria y quisieron comprobar que no era una alergia. Al final fue una reacción a la anestesia.
Después me subieron a la habitación y ya me trajeron a la niña, que pesó 2990 kg y midió 49 cm.
El trato a partir de ahí he de decir que muy bueno por parte del personal del hospital. Mi única queja es que se dejaron el goteo del calmante cerrado y estuve dos horas pidiendo a gritos que me subieran la dosis, cuando en realidad no me estaba llegando nada. Una enfermera vino a mirarse el gotero y dijo que estaba bien, y después vino otra y me dijo espantada que estaba cerrado. En fin, en cuanto me lo abrieron volví a respirar.
La recuperación super rápida, el lunes ya nos dieron el alta.
Inés es una niña sana y se porta super bien, aunque las primeras noches salió muy llorona. Lo único que tiene es una ligera luxación en la pierna derecha y la cadera, por la mala postura que tuvo en el útero. Pero me han dicho que seguramente se recolocará por si solo.
Bueno, os mando muchos besos a todas.
Cristina + Inés (5 días de vida)