Os dejé el martes sin absolutamente ningún síntoma.
Mi marido había estado de viaje una semana, y cuando volvió me dijo Qué tetas!!!, tú estás preñá!. Tengo muuuy poco pecho y me reí de él porque según yo, sólo era que hacía muchos días que no me veía. Yo no había notado un gran aumento, tal vez un pelín, pero no tanto.
El caso es que tanto insistió en que mis lolas no eran normales, que accedí a hacerme el test al día siguiente. Tenía un test gratuito de un centro de salud. No tenía ni idea de cómo se usaba y no tenía instrucciones.
Al día siguiente lo hicimos como nosotros consideramos que tenía que ser, y los resultados fueron muy raros. Mi marido enseguidita dijo: Negativo, allí está la raya de control y nada más. Pero yo no veía la raya de control, y mi marido no le quiso dar más importancia y soltó su teoría seguro que estos tests cuando dan positivo no hay duda y cuando dan negativo, nunca está claro... yo creo que es que no y punto. Total que reñimos un poco con el temita de si era válida o no la prueba y yo le dije que me haría otra yo sola.... (tremendista). Él se fue de viaje (pasaría una noche fuera) y yo me fui al trabajo pensando vale, embarazada no estoy, pero esa prueba ha salido no válida.
Cuando volví por la tarde, lo primero que hice fue ir a la basura para cerciorarme de que la prueba no era válida, y entonces la vi. Después de tooodo el día, se veía claramente la raya de control (que no estaba por la mañana) y debajo otra rayita como pintada con acuarela, muy difusa. Me puse a 100. Sangre en la cara, nervios... Cuando mi marido me llamó se lo conté. Pero yo lo que quería es que alguien más viera esa rayita y me dijera qué opinaba.... Decidimos esperar a que él volviera y hacernos otra prueba juntos. Me pasé toodo el día mirando la prueba, bajo distintas luces, a distintas horas...
Ayer por la tarde fui a la farmacia y compré un test. La farmacéutica me explicó cómo se hacía y entonces comprendí lo rematadamente mal que lo habíamos hecho el día anterior. Ni os lo cuento, pero me di cuenta que cualquier cosa que hubiera salido era inválida. Me quedé hecha polvo porque esa rayita de acuarela no valía porque lo habíamos hecho todo mal). Me dió el bajón y ya no me quería hacer más pruebas. Estuve a punto de dejarla en la farmacia. No me atrevía a ver un negativo después de tantas ilusiones.
Por fín la compré y fui a casa. Mi marido llegó sobre las 12 de la noche. Cuando vió la prueba mala con la rayita fina, creyó que era un +ivo (tal y como lo había creído yo). Le dije que había comprado otra pero que no me la quería hacer hasta el sábado 29, el día anterior me había dado muy mal rollito irme al curro con el disgusto.
Al final me convenció para no esperar ni un segundo más y hacerla ayer mismo. No, no, no, no, no, no. Pero al final fue que sí, vamos que hice el poco pis que tenía en una tacita. Qué nervios, qué mal rato, qué miedo. Pasados 5 minutos él fue a recoger la prueba y me la trajo con una cara que yo no podia descifrar muy despacito hasta la cama. Entonces las vi, perfectamente marcadas y azules, DOS RAYITAS!!!!!!.
No me lo podía creer. Fue un momento mágico. Lloré lloré y lloré. Pero con pita, sin vergüenza, totalmente desinhida, con pucheros, gritos. GENIAL. Mi marido también se emocionó. Nunca le había visto así.
Y aquí estoy. Todavía no se lo hemos contado a nadie. Menuda semanita que llevo.
Gracias a todas por estar allí y haberme ayudado a hacer más llevadera estos días.
Para las que estéis esperando y vayáis a esperar. Mi cuerpo sigue sin síntomas. Lo único el pecho, un poco más grande, pero ni flujo, ni náuseas, ni mareos, ni sueño... nada de nada.
Un beso a todas, gracias y suerte.
M.Paz