Pues como os digo, la maternidad y la perpetuidad de la especie ya se ha cobrado una nueva víctima. Hace 2 meses que tuve a mi niño y ayer me llamaron del trabajo. Mi jefe quería hablar conmigo. Empecé a sospechar y efectivamente, ME HAN DESPEDIDO. Se me terminaba el contrato este mes y dice que no me renueva, que se queda con mi sustituto (un hombre como él, qué casualidad!, que cobra la mitad que yo y hace la multitud de horas que haga falta). Eso sí, ya me dejó claro que no era por el niño ni nada de eso (ja, ja, ja), sino que la empresa está en horas bajas y que tiene que recortar gastos.
Por suerte, y como sabía que esto podía pasar, tenía una bala en la recámara y ya había aceptado otro trabajo para empezar en mayo. Me lo olía y he pasado por delante de mi jefe, el cual ya me había dado muestras de inhumanidad y machismo repetidamente y porque ya me había advertido que no le gustaba contratar a mujeres porque "traen problemas". Hoy doy gracias por haber dicho que sí al otro trabajo (donde cobraré más y tendré flexibilidad horaria) porque si no estaría en la p... calle con un bebé de 2 meses.
Tomad nota todas las que sospechéis que en vuestras empresas hay gente de mentalidad machista y retrógrada como en la mía, y si os sale algo mejor no dudéis en aceptarlo. Es triste, pero así es el siglo XXI en algunos países que se hacen llamar "avanzados". Que no hay suficiente con empujar el cochecito o cambiar los pañales en domingo, como hacen algunos hombres hoy en día (menos mi marido, que lo hace cada día y es un sol). Necesitamos un cambio de mentalidad profundo y la Administración es quien tendría que dar los primeros pasos. Dignidad para la maternidad y un año de baja maternal, como en los países que sí están en vanguardia.