Bueno... a parte del estudio científico que te comentan abajo y que ya he oñido muchas veces... te puedo hablar de mi experiencia personal... Yo llevo 12 años con mi marido y estoy enamorada de él, pero no es el mismo tipo de amor que cuando lo conocí (afortunadamente, como dicen por aquí, porque con la juventud el amor se vive de una manera muy poco racional que me dejaría exhausta después de 12 años). Además, las circunstancias tampoco son las mismas. Cuando yo conocía a mi marido mi única preocupación era estudiar, hacer la carrera y disfrutar de la vida. Hoy en día, tenemos mayores responsabilidades, un casa, unos trabajos, una hija... Todo esto condiciona la manera de sentir, pero esto no quiere decir que quieras menos a una persona, de hecho yo diría que hoy lo quiero más y mejor. Es un amor más sano, más cómplice, más sensato, menos alocado y muuuucho más estable. Eso sí, hay rachas. Cuando tenemos una racha mala me planteo muchas cosas, y cuando tenemos una buena parece que vuelvo a sentir ese cosquilleo y esos nervios del primer día, pero, claro está, desde la racionalidad de la edad... porque ya no soy una adolescente hormonada. Yo creo que los sentimientos no tienen por qué acabar, pero lo que es inevitable es que se transformen... No hablo de relaciones de 2-3 años, sino de relaciones más largas, ya que como te han dicho por aquí, el enamoramiento inicial dicen que dura sobre 3-4 años, así que plantearse estas cuestiones antes no tiene lugar.