Buenos días, os cuento un poquito, a mi nena le pusimos los pendientes cuando era un bebé, pero este invierno tuvo un problemilla en el lóbulo y se le infectó el agujero (tiene ahora 3 años y medio) pues cuando se le curó no consintió en que se lo pusiera, entonces le dije que tendríamos que ir a que se lo pusiera una chica y me dijo que vale (al sitio de los pendientes como lo llama ella) pues nada, ayer decidí llevarla, aun llevaba la marquita del agujero, y el otro pendiente lo llevaba puesto, pues la que se lo hizo, aunque llevó mucho cuidado, se lo hizo mal ya que mi peque se movió, yo no me di cuenta hasta que llegó mi marido y me dijo que estaba uno más alto que el otro, yo como todo el rato estuve mirando el nuevo pendiente por si se le ponía rojito no caí en compararlo con el otro. Ahora no me lo quito de la cabeza, que después de hacerle pasar un mal rato (aunque se portó como una campeona y ni lloró y salió de la tienda mirándose en los espejos toda contenta) que se le haya quedado mal. Ahora que hago, ¿se lo dejo y cuando ella sea más mayorcita se lo arregle? ¿se lo quito, que se le cierre y más adelante se lo hacemos otra vez? Yo voto por lo primero, de todas formas los agujeros tardan poco en cerrarse y podrá corregirlo ¿no? ¿que haríais vosotras?
muchas gracias