Llevo varios días leyendoos y tenía ganas de contaros varias cosas que me preocupan... algunas son normales y otras no tanto...
-Estoy embarazada de diez semanas y pico. Tengo 37 años y la verdad creí que me iba a costar más quedarme porque soy primeriza si bien, me quedé apenas embarazada en dos meses. Sé que cada caso es distinto pero todas mis amigas han tenido muchos problemas para quedarse, algunas incluso han adoptado o han tenido que recurrir a la fecundación in vitro y yo siempre creí que mi caso iba a ser idéntico. Por eso nada más quedarme embarazada, me embargó un sentimiento de injusticia. Os explico. Jamás he sentido lo que llaman reloj biológico, si no tuviera pareja jamás hubiera intentado quedarme embarazada. Pero a mi pareja le encantan los niños y yo siempre pensé que era una experiencia que no me quería perder llegado el momento y el momento llegó... Los dos nos hemos querido quedar embarazados, pero es cierto que en mi caso no me he embarcado con idéntica ilusión biológico-vital que él, pese a que nos queremos con locura. Lo de injusticia me refiero al dicho de "Dios le da pañuelo al que no sabe sonarse". Mis amigas, que siempre habían deseado quedarse embarazadas, tuvieron múltiples problemas... yo... sin embargo tuve la suerte de quedarme enseguida.
-Para colmo, aunque mi embarazo no está siendo extremadamente problemático sí que me da algunos problemas que complican mi vida diaria (tengo un trabajo muy estresante de entre 10 y 12 horas al día... y no desconecto ni los fines de semana)... Estoy teniendo nauseas constantes, que apenas se me quitan comiendo pero vuelven enseguida, además no soporto ciertos olores (el detergente, mi perrita, los alientos de la gente -los huelo todos y es asqueroso) y tengo unos gases terribles que apenas me dejan dormir y que me molestan si estoy sentada, tengo arcadas de vez en cuando y estoy de un sensible que asusta (lo mismo lloro con una noticia del Telediario, que como hoy que me ha dado un berrinche poruqe he pisado a mi perrita pese a que no le he hecho nada)...
-Pero hay algo que me preocupa aun más. Quiero muchísimo a mi pareja, pero noto que estoy empezando a rechazarla. Es algo que tiene que ver con el olor, no sé cómo explicarlo. Rechazo su olor, no me gusta, ni el olor de su piel, ni de su ropa, ni de su aliento... me produce muchísimo rechazo y eso me pone muy triste porque le quiero mucho. Tiene una infinita paciencia y lo hemos hablado y él lo acepta y me trata con mucho mimo (lo tengo todo el rato tomando smints o chicles), pero a mí todo me pone muy triste.
-Y la guinda del pastel... no siento ningún vínculo con mi bebé. Me refiero a que me cuido, como bien, etc., pero para mí como si no existiera. Apenas pienso en él, solo en las molestias que me genera... no noto vínculo alguno... y me preocupa
Todo lo que os he contado me hace sentirme muy muy culpable y enormemente triste, como si no fuera una buena madre o no estuviera dando la talla... no sé qué pensáis y si os ha pasado.