Ojalá tengáis un parto tan bonito como el mío

Mi nena nació el día 27 de octubre. A las 8 y media de la mañana noté que había roto aguas, aunque sólo mojé un poco las braguitas. Me duché tranquilamente y preparamos al mayor para llevarlo a casa de mi madre. Llegamos al hospital antes de las 11 y me hicieron una prueba para comprobar que era líquido amniótico y, como sí lo era, me ingresaron. Como entré con 3 centímetros de dilatación y sin contracciones regulares me mandaron a la habitación a dilatar con mi marido. Me dieron de comer (no me vino mal, pues llevaba unos días un poco malilla y llevaba sin comer nada desde la sopa de la noche anterior) y me dijeron que, cuando estuviese media hora con contracciones cada 4 ó 5 minutos, les avisase. A la hora y media de tener fases de 3, 4 y 5 minutos de intervalo les dije lo que pasaba y me mandaron a dilatación (después de decirme la buena cara que tenía, jeje). Por cierto, ayuda mucho a que las contracciones sean más regulares y aumenten en el tiempo ponerse en cuclillas durante unos segundos de vez en cuando.
En dilatación llamaron a mi marido en menos de media hora y estuvo acompañándome hasta el final. Las matronas que me atendieron fueron GENIALES en todo. Cuando había dilatado 8 centímetros empezó a dolerme mucho el ano, y tenía ganas de ir al baño, pero era la cabecita de la niña empujando. Como giró un poquito la cabeza me hicieron ponerme de lado hasta que se giró de nuevo. Las matronas me ayudaron con las respiraciones porque no las hacía bien y las contracciones ya venían fuertes. En cuanto tuve ganas de empujar, me llevaron con la camilla al paritorio y me dijeron que me subiese al potro. Creía que no podría, porque me dolía y parecía que se me iba a caer, jaja.
Ya en el potro, me pusieron un espejo grande para que pudiésemos ver cómo salía y las matronas me iban explicando lo que iba a sentir (aquí en el foro lo leí exáctamente igual), la quemazón y la sensación de que me iba a partir en dos. También me iban indicando cómo tenía que empujar y cuándo hacerlo y que no iban a hacer episiotomía (yuhu!). Cuando estaba a punto de salir la cabecita, me dijeron que si quería sacarla yo con las manos y así lo hice y me la puse encima. La taparon con una toalla y le dijeron a mi marido que cortase el cordón. Me la pusieron al pecho allí mismo y sólo se la llevaron un momento para vestirla y poco más. A mí me pusieron un puntito, porque me desgarré un poco. La niña sacó 10/10 en el test Apgar, que dice mi matrona del centro de salud que es la vitalidad con la que nace en niño, y que suele ser como mucho de 10/9.
La recuperación está siendo mucho más fácil que con el primer parto y me encuentro mucho mejor. Tengo un buen recuerdo de mi primer parto, pero este segundo ha sido impresionante, gracias a las dos matronas que me atendieron. Ojalá vosotras tengáis un parto tan bonito como el mío.