Hicimos una Fiv en IVI Madrid y aparte de que ni los médicos sabían bien el protocolo a seguir, las enfermeras menos. No te atienden las llamadas y cuando llamas con alguna pregunta, cada vez te dicen una cosa.
Tener cuidado con el contrato porque al firmar todo son facilidades, pero después, no devuelven el dinero de servicios que no han realizado, como nos habían comentado a la hora de firmar.
Si hay alguna urgencia, allí no hay nadie para atender las llamadas, incluso un día nos dieron una cita para un día que estaba la clínica cerrada por la tarde.
En definitiva una vergüenza.
Ahora hemos probado con otra clínica y definitivamente mucho mejor, incluso atienden los domingos si es el día en el que toca hacer algo del tratamiento.